Dos veteranos, Dani Giménez y Eneko Bóveda, dieron la cara tras el partido. Ambos coincidieron: el duelo contra el Rayo Majadahonda debe ser el final de la caída. Buscan explicaciones y no encuentran más que las que pasan por el trabajo e incluso la fe.
Dani Giménez: “Hemos tocado fondo”
La valoración del partido. Ha sido el reflejo de cómo está el equipo. Actuaciones individuales hay pocas salvables, si acaso Didier en corte defensivo. Le agradecemos el esfuerzo en una situación tan complicada y sin haber jugado todos los partidos en esa posición. Empezamos bien, pero perdimos fuelle. No hay frescura ni ideas claras, nos penaliza físicamente, llegamos tarde a la presión.
Nefasta actuación. Estamos dolidos y fastidiados por culpa nuestra. Hemos tocado fondo, jugando en casa, un cero a dos, sin jugar bien, nos vimos superados. Hablamos mucho del estado mental, ahora toca hablar de la personalidad de cada uno, de que cuando las cosas salen mal hay que salir reforzados de estas situaciones. Peor que hoy es complicado hacerlo.
Soluciones. Algo hay que hacer. Lo fácil es el entrenador. En nuestra mano está ayudarle. Hace lo posible porque estemos tranquilos. Los que jugamos somos nosotros. Si hay algún jugador que cree que por cambiar al entrenador vas a jugar mejor se equivoca. Cuando pierdes estás fastidiado. Entiendo que desde fuera se hable del cambio más fácil, pero todo pasa por los jugadores. Tenemos que tener autocrítica, da igual quien venga si no damos un paso al frente esté Natxo, Guardiola o Zidane.
Sobrepasados. La palabra es esa. No hay una más clara. Hicimos una buena presión al inicio contra un rival alegre, lo que nos falta a nosotros. Tienen calidad, hicieron contras y llevamos semanas con muchas dudas y en Riazor se multiplican por dos porque la gente pide más, sabes que es el día y que te está costando. Vives estas etapas en distintas ciudades, equipos o entrenadores. La única solución es olvidar de lo que haces mal y centrarnos en lo que tienes que hacer.
Eneko Bóveda: “Quisiera animar a todos, dejar un mensaje de fe en un momento difícil”
Tendencia a la baja. Hace mucho que no ganamos en casa. Hacemos partidos poco brillantes, por no decir otra cosa. Hoy se juntó todo. Fue el peor partido en el peor momento. Lo más preocupante o lo que más fastidia es no ver a los jugadores que sabes que son muy buenos hacer lo que saben hacer. Cuando sabes que el que tienes al lado sabe hacer cosas, las ha hecho muchas veces y no salen, y el de al lado tampoco. Eso es duro, que nadie llegue al aprobado.
¿Qué hacer? Bastante tenemos con mirarnos uno al otro, transmitirnos confianza y exigirnos un pelín más, buscar la fórmula para que el recuerdo de nuestra nueva versión salga.
El futuro del entrenador. Jugar a directores deportivos nos queda hasta feo. Entiendo todo. Al final vas al campo con ilusión y cada uno que viene al campo tiene sus sentimientos y su manera de vivirlo.
La afición. Sabíamos que era un partido peligroso a nivel ambiental y yo dentro del campo he sentido apoyo al equipo. Después a nadie le puede pillar de sorpresa el enfado de la gente. Es una forma de pedirnos más y demostrarnos que no están contentos. Quisiera animar a todos, dejar un mensaje de fe en un momento difícil y que todos recordemos el partido como en el momento en que tocamos fondo y encontramos soluciones.
