Qué demostración de aguante, de dignidad y de supervivencia. El Deportivo ha vuelto a ser fiable cuando más lo necesitaba, y le ha servido para dejar en la lona al máximo favorito de la promoción de ascenso. La machada de Riazor tenía que completarse en La Rosaleda, un escenario más que complicado donde el Málaga jugaría con doce, pero los de Martí volvieron a sacar fuerzas de sus almacenes más ocultos para convertirse en un muro casi infranqueable. Aguante, aguante y aguante hasta que los coruñeses se encontraron un disparo del capitán Bergantiños que Munir convirtió inconscientemente en oro. 0-1 y a la final.
Martí no se andó con experimentos, o al menos de base. Colocó lo que había funcionado en aquella magistral segunda parte de Riazor pero con variación de piezas, con Matías Nahuel por la izquierda y Vicente Gómez en el enganche. La teoría parecía correcta, pero la cruel práctica le vino de bruces. Lo esperado, tocaba remar. El Málaga, necesitado de un mínimo de dos goles para clasificarse, salió con la energía que exigía tal compromiso y obligó al Deportivo a achicar agua durante buena parte de los primeros 45 minutos. Ontiveros -un futbolista de Primera- volvió a brillar y estrelló un balón al palo de Dani Giménez a los escasos diez minutos. Fueron momentos de angustia para los de Martí, que aún así se defendieron como gato panza arriba a la espera de alguna oportunidad de defender con el balón.
Nahuel -muy sacrificado- y Saúl defendieron a Hicham en la banda izquierda, mientras que de Ontiveros se encargaron tres futbolistas: Bóveda, Pedro y Álex Bergantiños. Aún así, el extremo estrelló otro balón al palo. El Dépor consiguió asentarse un poco más a los veinte minutos beneficiado del buen trato de balón de jugadores como Vicente y Edu Expósito, pero ni de lejos generó el peligro que sí alcanzó el Málaga. Nahuel sí estuvo a punto de hacer trabajar a Munir, pero Cifuentes blocó su disparo. Expósito, por otra parte, también culminó de forma poco satisfactoria una gran combinación en la banda derecha defensiva de los locales. El Dépor se había ido vivo al descanso, pero aún quedaban otros 45 minutos.
El Deportivo aguantó las embestidas constantes del Málaga, con dos palos de Ontiveros incluidos
La reanudación tampoco comenzó excesivamente bien para los del rojo San Juan. Jack Harper cazó un balón en el área pequeña nada más comenzar la segunda parte, pero para fortuna de Dani Giménez el bote provocó que acabara en las nubes. Era el aviso de la continuidad. No habría un cambio radical como aquel de Riazor, tocaba aguantar y seguir hasta que al Málaga le pudieran la ansiedad y el físico. Ocurrió. La tuvo Blanco Leschuk con un buen zurdazo desde la frontal que desvió Dani Giménez, pero a diferencia de la primera parte no existiría ningún acoso en forma de ocasiones claras. Ontiveros fue anulado y sus compañeros fueron dejando cada vez más espacios, pero el Deportivo -con oxígeno renovado gracias a las entradas de Cartabia, Valle y el retornado Quique- no terminó de aprovecharlos, al menos hasta que Álex Bergantiños recibió un balón completamente solo con opción de internarse al área. El capitán optó por terminar jugada con un sencillo disparo que acabó en oro. La pelota aterrizó dentro de la portería de Munir, que empeoró más si cabe su actuación en el cuarto gol de Riazor con un fallo de los que duelen. Corría el minuto 82 y el Málaga necesitaba entonces tres goles, pero la mente ya estaba muerta. El Dépor se había clasificado a base de casta y aguante. Ahora esperará a Mallorca o Albacete.
FICHA TÉCNICA
Málaga: Munir; Juankar, Pau Torres, Luis Hernández, Cifuentes (Pacheco, min. 83); Keidi Bare, Adrián González, Ontiveros, Hicham (Renato Santos, min. 46); Jack Harper (Koné, min. 55), Blanco Leschuk.
Deportivo: Dani Giménez; Eneko Bóveda, Michele Somma, Domingos Duarte, Saúl García; Álex Bergantiños, Vicente Gómez (Fede Cartabia, min. 51), Matías Nahuel (Borja Valle, min. 57), Pedro Sánchez, Edu Expósito; Carlos Fernández (Quique, min. 70).
Goles: 0-1 (Álex Bergantiños, min. 82).
Árbitro: Díaz de Mera, del Comité Castellano-Manchego. Mostró tarjeta amarilla a Luis Hernández (min. 9), Keidi Bare (min. 41), Adrián González (min. 74) y Ontiveros (min. 88) por parte del Málaga. En el Deportivo la vieron Bóveda (min. 34), Carlos Fernández (min. 37) y Dani Giménez (min. 68).
Incidencias: Partido de vuelta de la primera semifinal de la promoción de ascenso a Primera División. La Rosaleda, Málaga, 27.275 espectadores.