La estabilidad a nivel económico del Deportivo tiene una palpable consecuencia si se efectúa un repaso contractual de la plantilla. Cuando en la primavera de 2013 el equipo sufrió su penúltimo descenso a Segunda División disponía de hasta once futbolistas cedidos (Abel Aguilar, Bruno Gama, Pizzi, Silvio, Nelson Oliveira, Evaldo, André Santos, Salomao, Kaká, Roderick y Tiago Pinto, que tenía dorsal del filial, pero integraba el primer equipo). La campaña del regreso se cubrió con apenas cinco (Sissoko, Ifrán, Salomao, Rabello y Borja Bastón) y un nutrido grupo de canteranos, muchos de los cuales perdieron peso en el equipo con la llegada de refuerzos para afrontar el reto de la máxima categoría. Aquel año, con el club recién salido del concurso de acreedores y un tope salarial exigüo, se cumplimentó con nueve futbolistas que no pertenecían a la entidad (Canella, José Rodríguez, Salomao, Cavaleiro, Sidnei, Hélder Costa, Fariña, Juanfran y Borja López), cifra que se redujo a siete la campaña siguiente (Roef, Kakuta, Ola John, Joselu, Guilherme, Carles Gil y Marlos Moreno).
La firma del acuerdo con Abanca para refinanciar la deuda que el club mantenía con la Agencia Tributaria le otorgó al Deportivo músculo para optar a futbolistas en propiedad y disponer al menos de un pequeño patrimonio que como luego se constató dejó unos 20 millones en caja a pesar del descenso. Cinco futbolistas jugaron cedidos en tan nefasto ejercicio (Lucas Pérez, Adrián, Fede Valverde, Bakkali y Koval). En la actual temporada son seis (Ortolá, Domingos Duarte, Marí, Didier Moreno, Carlos Fernández y Nahuel), pero con una particularidad y es que tan solo dos de ellos, el central portugués y el delantero sevillano, tienen la obligación de volver a sus clubs de origen aún en el caso de que el Deportivo consiga el ascenso.
En la otra cara de la moneda, el Deportivo tiene a otros futbolistas cedidos fuera de A Coruña. Tres de ellos juegan en Primera División (Juanfran, Róber y Diego Rolan), el otro es Francis Uzoho, en el fútbol chipriota. Además podría ejercer una opción de repesca al finalizar esta temporada sobre Borja Galán, que es propiedad del Alcorcón.
