Vítor Silva ya es jugador del Deportivo a todos los efectos. El centrocampista portugués, de 35 años de edad, se encontraba entrenando a las órdenes de Natxo González desde el pasado 19 de febrero mientras se dilucidaba su incorporación definitiva al equipo. Finalmente tanto el técnico como Carmelo del Pozo han dado el visto bueno a la operación, así que Silva ocupará la única ficha libre restante del primer equipo. Lucirá el dorsal 25 y firma con el Deportivo hasta final de temporada. Actualmente, Silva se recupera de una sobrecarga fruto de sus primeras sesiones preparatorias.
El día del primer entrenamiento del portugués el club anunció que la ya completada incorporación estaba “supeditada a la evolución de los lesionados de la plantilla en la demarcación que ocupa”. Actualmente la lista de lesionados en el centro del campo es menor que entonces. El único jugador que a día de hoy continúa en el dique seco es Michael Krohn-Dehli, todavía recuperándose de una lesión de tendón de Aquiles.
Natxo González conoce muy bien a Silva, al que tuvo bajo sus órdenes en el Reus: “Si está aquí es porque tiene alguna posibilidad de poder quedarse. No ha dejado de entrenar en todo el año. Lo conozco mucho, sé el tipo de jugador que es”, comentó hace pocos días cuando se le preguntó por él en sala de prensa. Domingos Duarte, compatriota de Silva, también le elogió ante los medios: “Sabe lo que es el fútbol y está preparado para todo. Ojalá se quede. Es un medio con unas características particulares y nos puede ayudar”.
Vítor Emanuel Cruz da Silva (Penafiel, 1985) proviene del mercado de agentes libres tras su desvinculación del Reus, fruto de los problemas del club con el límite salarial que acabaron significando su expulsión de la Liga. El luso se incorporó a coste cero al equipo catalán en la temporada 14-15 después de un poco afortunado paso en el Sporting de Portugal. Por entonces el equipo entrenado por Natxo González todavía luchaba por ascender a Segunda División. Poco tiempo le hizo falta para convertirse en el jugador de más calidad del Reus, que con él al mando logró subir a la categoría de plata del fútbol español. El veterano centrocampista disputó dos temporadas en Segunda, pero al principio del presente curso no pudo ser inscrito por los mencionados incidentes económicos del Reus. Con los rojinegros llegó a disputar un total de 98 partidos, en los que anotó 11 goles.
