El Deportivo se enfrentará a Las Palmas (domingo, 20 horas) en su segundo partido consecutivo en Riazor, pero el hecho de jugar en casa parece haberse convertido en una losa. El técnico Natxo González se refiere, entre otras cuestiones, a esta situación.
Jugar como local. “Fuera de casa estamos más cómodos. Cuando juegas como local te empujan más a la precipitación y la obligación de agradar a tu gente, pero es lo que hay. Jugar en Riazor debe ser un refuerzo, no un castigo. Hay jugadores a los que le pesa la presión y otros no, cada uno es como es. Lo que tratamos nosotros es de reforzarles y hacerle entender a los que les pesa que cómo vamos a tener miedo a jugar en nuestro campo. Esto se soluciona con puntos. (…) El otro día se me olvidó agradecer el apoyo de la afición y me dolió bastante. Les doy las gracias por lo de la semana pasada, y de antemano por lo de mañana”.
La afición deportivista ya ha comenzado una movilización para recibir a Natxo y su equipo en la Puerta 0 de Riazor dos horas antes del partido, a las seis de la tarde.
Los tropiezos en los últimos minutos de los partidos. “Tenemos que concretar más y mejor qué hay que hacer con el marcador a favor en fases como esa. Unos quieren ir hacia arriba para conseguir otro gol y otros con más experiencia saben gestionarlas mejor”.
El fútbol reciente del equipo. “Con lo que estamos haciendo ahora no nos está llegando para ganar. Estadísticamente tenemos mejores números que el rival, pero luego está lo que sucede en las áreas. Nos falta regularidad y poso, y no sé si tranquilidad para madurar los partidos y desgastar al rival, pero no es lo mismo que este esté más replegado o que te venga a apretar arriba. Ahí sufrimos más. (…) Nadie juega con la alegría que se jugaba al principio de la temporada. Tenemos que ir a ese tipo de fútbol pero entendiendo los momentos. Ahora es el momento de ganar, aunque se gane más feo”.
La dinámica de Las Palmas. “Cuando hay un cambio de entrenador como el suyo existe una reacción individual y colectiva. Es un equipo importante, con buenos futbolistas y poco margen”.
